De momento se desconocen cómo quedará conformado el Congreso de Estados Unidos ya que algunos estados continúan con el escrutinio de votos. Aunque muchos pensaron que el proceso duraría unas pocas horas, lo cierto es que el conteo de votos se puede alargar mucho más.
“En Estados Unidos es casi imposible que se conozca en la misma noche de las elecciones los resultados”, dice el politólogo Marc V. Andreu en declaraciones, argumentando que “cada estado tiene una legislación diferente y cuentan los votos de forma diferente”.
Legislación diferente en cada estado
Así que los resultados no son “oficiales” hasta que sean certificados todos los votos y ese proceso se puede demorar varios días o incluso semanas.
En Arizona, por ejemplo, la ley marca que todas las boletas, tanto las que se depositaron el mismo día de elecciones como las que se enviaron por correo, deben haberse hecho efectivas antes de las 7 de la noche de la jornada electoral en cuestión. Sin embargo, se da un margen de hasta 20 días para que se pueda hacer el recuento de votos.
Esa medida ha sido criticada por la bancada republicana. Kari Lake, candidata republicana a la gobernación de ese estado, defendió “la reforma de las elecciones” argumentando que “todos los residentes de Arizona, ya sean demócratas, independientes o republicanos, cuando se acuesten la noche de elecciones sepan quién ganó y estén satisfechos de que fue una elección justa”.
Margen de tiempo para contar boletas
En Nevada pasa algo parecido ya que los distritos electorales tienen un margen de cuatro días adicionales. “Los condados de Nevada tienen cuatro días más para poder contar las boletas que no llegan a tiempo e incluso dan un tiempo prudencial de dos días a los votantes en caso de que haya algún tipo de error en los sobres o si falta información del votante”, comenta Andreu.
El voto anticipado y por correo
Aunque más de 30 millones de personas votaron de forma anticipada y por correo, el proceso de conteo no empieza hasta que se cierran las urnas el día de las elecciones, lo que retrasa la certificación de los resultados. En otros estados, sin embargo, no es así.
La mayoría de los estados, por ejemplo, Florida o Georgia, los votos se empiezan a contar hasta días antes de las elecciones. Pero hay estados como Wisconsin o Pensilvania en los que se tienen que contar el mismo día de las elecciones”, expone el experto.
Como se está viendo, en algunos estados los resultados están siendo muy ajustados y la diferencia entre demócratas y republicanos se da por muy pocos votos. En esos casos, como dice Andreu, suelen haber reclamaciones para que se recuente los votos de forma manual, a pesar de la consecuente demora.
“Si los resultados son muy ajustados da sospechas de error humano. Con lo que deberán volverse a contar todos los votos y aún retrasaría aún más la publicación de los resultados”, comenta.
























