El gobernador de Puerto Rico, Pedro Pierluisi, informó que logró que el Senado de Estados Unidos atienda el próximo 18 de junio el proyecto de estatus 3231, del demócrata Martin Heinrich, que aborda el futuro político de la isla.
Esta medida es la versión senatorial del proyecto 2757 de la Cámara de Representantes y dispone la celebración de un plebiscito vinculante autorizado por Washington que permita a los residentes de Puerto Rico elegir entre la estadidad (anexión a EE.UU.), la independencia y la soberanía en libre asociación.
La audiencia, en la que participará el gobernador, se llevará a cabo como parte de los trabajos de la subcomisión de Tierras Públicas, Bosques y Minería, que forma parte de la comisión de Energía y Recursos del Senado, que atiende asuntos relacionados a los territorios, incluyendo Puerto Rico.
“Nuestro reclamo y la lucha porque se atienda el estatus de Puerto Rico ante el Congreso para garantizar la igualdad de derechos para todos los puertorriqueños y puertorriqueñas volvió a rendir frutos”, destacó Pierluisi en un comunicado.
“Continuaré incansablemente realizando esfuerzos para que, finalmente, tengamos los derechos que nos merecemos como ciudadanos americanos”, sostuvo el gobernador.
Por su parte, Luis Dávila, director ejecutivo de la Administración de Asuntos Federales de Puerto Rico expresó que es “un avance significativo en el esfuerzo para resolver el estatus político” de la isla.
“Es un paso adelante hacia un debate más profundo y estructurado sobre nuestro futuro político”, subrayó Dávila, quien urgió a respetar “la voluntad del pueblo puertorriqueño de acabar con la colonia y alcanzar la igualdad que solo es conferida por la estadidad”.
El Partido Nuevo Progresista (PNP) de Pierluisi aboga por la llamada estadidad, es decir, que Puerto Rico se convierta en un estado de pleno derecho de EE.UU. y deje de ser un Estado Libre Asociado.
Otros partidos de la isla optan por la independencia de la isla o se inclinan por mantener el estatus actual o diseñar una soberanía en libre asociación.
Por ahora, las autoridades siguen con sus gestiones para que el Congreso federal apruebe un referéndum vinculante sobre el tema del estatus político.