La Unión Europea impuso el jueves más sanciones económicas a Rusia, sumándose a las nuevas medidas punitivas anunciadas en la víspera por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, contra la industria petrolera rusa. Autoridades y medios estatales rusos desestimaron las medidas occidentales afirmando que son mayormente ineficaces.
Se trata de un esfuerzo ampliado para asfixiar los ingresos y suministros que financian la invasión de Ucrania por parte de Moscú y para forzar al presidente ruso Vladímir Putin a negociar el fin de la guerra.
Estas medidas son un triunfo para el presidente ucraniano Volodymyr Zelenskyy, que lleva mucho tiempo haciendo campaña para que la comunidad internacional castigue al Kremlin de forma más exhaustiva por atacar a su país.
“Esperábamos esto. Dios mediante, funcionará. Y esto es muy importante”, afirmó Zelenskyy en Bruselas, donde los países de la UE que asistían a una cumbre anunciaron la última ronda de sanciones contra Rusia.
A pesar de los esfuerzos de paz encabezados por Estados Unidos en los últimos meses, la guerra no muestra signos de cesar tras casi cuatro años de combates, y los mandatarios europeos están cada vez más preocupados por la amenaza de Rusia.