Las fuertes nevadas del jueves que azotaron partes del oeste del estado de Nueva York persistirán hasta el viernes, cuando lo peor de la tormenta potencialmente histórica puede provocar la caída de árboles y daños a la propiedad.

“La nevada producirá una visibilidad casi nula, un viaje difícil o imposible, daños a la infraestructura y paralizará a las comunidades más afectadas”, dijo el jueves el Servicio Meteorológico Nacional. “Aire muy frío acompañará este evento, con temperaturas 20 grados por debajo de lo normal previsto para el fin de semana”.