Las plantas suelen ofrecerle una vista alegre y natural al hogar, otorgando un toque de color a cualquier espacio, además son ideales para purificar el aire del ambiente al filtrar las sustancias contaminantes y, algunas son mejores que otras para cumplir esta función.
Los contaminantes más comunes y que algunas plantas se encargan de filtrar con mayor efectividad son benceno, xileno, amoníaco, tricloroetileno y formaldehído, así lo dio a conocer un estudio realizado por la NASA en 1989, par determinar cuáles son las ideales para purificar el aire en espacios cerrados.
La investigación de la NASA se centró en investigar diferentes formas para limpiar el aire en sitios cerrados como las estaciones espaciales, concluyendo que existen 5 tipos de plantas que, más allá de absorber dióxido, y liberar oxígeno a través de la fotosíntesis, promueve la eliminación de contaminantes orgánicos.
Plantas para purificar el aire
Las plantas que a continuación se mencionarán, tienen la capacidad de purificar el aire y eliminar contaminantes:
El Potus: Una de las plantas para purificar el aire más conocidas es el potus, también conocida como poto, al tener entre sus ventajas que no requiere de mucho cuidado, solo se debe regar cuando esté un poco seca, por lo que también es ideal para tenerla en en oficinas, centros comerciales, etc.
Se caracteriza por ser una enredadera, así que se puede colgar en una estantería pequeña, o en un taburete, cuenta con una hoja perenne en forma de corazón, necesita luz indirecta y se recomienda dejarla secar por completo el sustrato entre cada riego, es capaz de absorber sustancias nocivas como el formaldehído, el xileno y el benceno y se adapta perfectamente a lugares en donde la temperatura se sitúa entre los 17 y los 30 grados centígrados.
El aloe vera: Colocar una planta de aloe vera frente a la ventana ofrece más que decoración, puede purificar el aire y eliminar toxinas como el formaldehído y el benceno, que se suelen encontrarse en barnices, limpiadores de suelos y detergentes, pero es necesario colocar esta planta siempre en un lugar soleado.
Esta planta se debe colocar en cualquier lugar del hogar que cuente con una entrada directa de la luz del sol, adicionalmente no requiere de un riego frecuente y permitir la purificación del aire en los hogares para una mejor oxigenación de los habitantes.
Sanseviera: Esta es una planta africana que tiene unas hojas carnosas y crecen en sentido vertical, lo que quiere decir que ocupa poco espacio y otro aspecto interesante es que no posee tallo, su capacidad de depurar el ambiente las hace interesantes para tenerlas en el hogar.
Palmera de bambú: Es considerada una de las mejores plantas para purificar el aire, gracias a su capacidad de hacerlo en el sitio donde está ubicada, llegando incluso a eliminar productos químicos peligrosos como el el formaldehído, el xileno o el tolueno.
Sin embargo, esta planta sí debe regarse con frecuencia y recibir luz de vez en cuando, aunque no debe exponerse mucho al sol, una de las opciones para tener una palmera de bambú en el hogar es la sala de estar, que además ofrece una decoración sutil para los espacios.
Espatifilo: Esta planta también se conoce como lirio de la paz o cuna de moisés, posee hojas verdes y flores blancas, perenne, que procede de Sudamérica, a diferencia del resto, necesita una buena iluminación aunque no el sol directo y se adapta a cualquier tipo de entorno o tierra.
El lirio de paz es fácil de cuidar, necesita un riego moderado, más abundante en primavera y verano, para tener siempre la tierra húmeda, pero uno de los aspectos que se debe tener en cuenta a la hora de comprar esta planta y llevarla al hogar es su característica tóxica para las mascotas.
Ficus robusta: Esta planta es fácil de cultivar y uno de sus principales atractivos es que necesita pocos cuidados, por lo que es ideal para principiantes que quieren comenzar a decorar sus hogares y purificar sus espacios.
Tolera mejor el calor que el frío, así que no es recomendable mantenerla a temperaturas inferiores a 14 °C. Tampoco debe exponerse a corrientes frías, se recomienda ubicarla en un sitio con mucha luz, pero sin estar expuesta a luz solar directa. En invierno se riega una vez a la semana y en verano, cada tres o cuatro días, además se recomienda podarla cuando crece demasiado.