México reconoció este fin de semana que el gobierno de Estados Unidos suspendió todas las importaciones de aguacates mexicanos después de que un inspector estadounidense de sanidad en una planta mexicana recibiera una amenaza en el estado de Michoacán, el único totalmente autorizado para exportar al mercado estadounidense.
La sorpresiva suspensión se confirmó en vísperas del Super Bowl, la mayor oportunidad de ventas del año para los productores mexicanos de aguacate.
Las exportaciones de aguacate son la última víctima de las batallas territoriales de los cárteles de la droga y la extorsión de los productores de aguacate en Michoacán, considerado como uno de los más peligrosos de México.
El gobierno estadounidense suspendió todas las importaciones de aguacates mexicanos “hasta nuevo aviso”, informó la Secretaría de Agricultura mexicana a través de un comunicado.
“La autoridad sanitaria estadounidense hoy hizo del conocimiento al Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria [Senasica] que tomó la determinación luego de que uno de sus oficiales, quien realizaba la labor de inspección en Uruapan, Michoacán, recibió una llamada de amenaza a su teléfono celular oficial”, escribió la dependencia mexicana.