Entre 2021 y 2023, Estados Unidos registró un notable incremento del 15 % en las cirugías bariátricas realizadas a adolescentes, a pesar de la reciente aprobación de fármacos altamente eficaces para tratar la obesidad en esta población.

Este hallazgo, revelado por investigadores del Centro Médico UT Southwestern y publicado en The Journal of Pediatrics, ofrece una perspectiva detallada sobre cómo se está abordando actualmente la obesidad severa en los jóvenes, una condición que continúa en ascenso dentro del grupo etario de 13 a 19 años.

Enfermedades cardiovasculares, hepáticas, renales, apnea del sueño y trastornos emocionales figuran entre las principales complicaciones asociadas con esta afección.

Ante este escenario, la cirugía metabólica y bariátrica (MBS) que incluye procedimientos como la manga gástrica, el bypass gástrico y la banda gástrica continúa siendo considerada el tratamiento más eficaz para lograr una pérdida de peso sostenida y reducir riesgos a largo plazo.

El análisis se llevó a cabo mediante el uso de datos del Programa de Acreditación y Mejora de la Calidad de Cirugía Metabólica y Bariátrica, que recopila información de casi mil centros médicos acreditados en EE. UU.

Los investigadores compararon el número de procedimientos realizados en adolescentes y adultos durante el periodo de tres años, justo antes y después de la aprobación por parte de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de nuevos medicamentos para bajar de peso, conocidos como agonistas del receptor del péptido similar al glucagón tipo 1 (GLP-1RA).

La semaglutida, uno de los principales compuestos de esta clase, fue aprobada para uso en adultos en junio de 2021 y para adolescentes en diciembre de 2022.

Tratamientos no son cubiertos por Medicaid

A pesar de la promesa que ofrecen estos medicamentos capaces de reducir entre un 15 % y 20 % del peso corporal inicial, el estudio reveló que su impacto aún es limitado en esta población debido a barreras económicas y de acceso.

Según la profesora Sarah Messiah, codirectora del estudio y experta en epidemiología, estos tratamientos no están cubiertos por Medicaid en la mayoría de los estados, incluido Texas, y tampoco son ampliamente financiados por seguros privados, lo que restringe su uso a quienes pueden costearlos.

La manga gástrica fue la intervención más común, representando más del 86 % de los casos. Aunque entre los adultos también se observó un crecimiento de los procedimientos de MBS entre 2021 y 2022, el número descendió en 2023, lo que sugiere que una parte significativa de los adultos ha comenzado a optar por los nuevos fármacos como alternativa no invasiva a la cirugía.

El estudio también expuso una tendencia étnica importante, el aumento de cirugías entre adolescentes estuvo impulsado mayoritariamente por jóvenes hispanos y afroamericanos, dos grupos que enfrentan tasas más altas de obesidad grave y suelen tener menor acceso a recursos preventivos y de tratamiento.

Otro dato es que alrededor de un tercio de los adolescentes que se sometieron a cirugía presentaban un índice de masa corporal superior a 50, lo cual indica un grado de obesidad extremadamente severo.