La ciudad de Acapulco amaneció el sábado con una escalofriante escena en uno de sus puentes peatonales en plena zona céntrica.

Cuatro cuerpos colgaban sin vida con huellas de tortura y mantas amenazantes firmadas por una presunta célula criminal llamada «Los Rusos» y/o «La Rusada».

Los cuerpos estaban distribuidos en el lugar y uno de ellos estaba atado y colgado con una cuerda del puente, con los pantalones bajados.

El crimen se reportó en el paso peatonal de la avenida Adolfo Ruiz Cortines, en la colonia La Laja, y según la Fiscalía estatal, ocurrió a las 06:30 horas.

La escena dejó a los ciudadanos impactados por la brutalidad y el grado de violencia que se vivió en pleno corazón de la ciudad.

Las mantas amenazantes que fueron colgadas junto a los cuerpos señalaban a supuestos seguidores de Félix Alejandro Magno Acevedo, «El Correcaminos», y hacían alusión a amenazas dirigidas a agentes de diferentes órdenes de Gobierno y personal penitenciario.

Este hecho sin duda ha sembrado el terror en la población, que cada vez vive con mayor miedo y preocupación por su seguridad y la de sus seres queridos.

Las autoridades estatales han iniciado una investigación exhaustiva para dar con los responsables de este hecho atroz y llevarlos ante la justicia. Sin embargo, este tipo de situaciones siguen siendo una triste realidad en muchas ciudades del país y demuestran la urgente necesidad de medidas efectivas para combatir la violencia y el crimen organizado en México.