Esta semana los asesores federales de salud de Estados Unidos respaldaron la vacuna de Pfizer contra el Virus Respiratorio Sincitial (RSV, por sus siglas en inglés), la primera de su tipo para mujeres embarazadas.

El año pasado el virus fue el responsable de que los hospitales estuvieran llenos de bebés en grave estado de salud.

La vacuna dará a las mujeres una sola inyección al final del embarazo, entre las semanas 24 y 36, para que desarrollen anticuerpos que combaten el RSV que pasan a través de la placenta, al igual que pasan la protección contra otros insectos a sus bebés.

La vacuna es más de 80 % efectiva

En el estudio internacional de Pfizer participaron 7,400 mujeres embarazadas, la vacunación materna demostró ser un 82 % efectiva para prevenir el RSV grave durante los primeros tres meses de vida más vulnerables de los bebés.

Incluso, a la edad de 6 meses, todavía estaba demostrando un 69% de protección para el bebé contra enfermedades graves.

A modo preventivo la FDA pidió a sus asesores científicos que consideraran si una ligera diferencia en el parto prematuro entre las madres vacunadas y las que recibieron una inyección ficticia era motivo de preocupación.

Ante esto, Pfizer se comprometió a seguir de cerca el uso de la vacuna en el mundo real para obtener más evidencia. Los asesores decidieron por unanimidad que la inyección es efectiva y votaron 10 a 4 que hay datos de seguridad adecuados. 

Si la FDA finalmente aprueba la inyección materna, marcaría un segundo hito en la búsqueda de décadas para prevenir el virus respiratorio sincitial.

Qué debemos saber sobre el RSV

El RSV es una molestia similar al resfriado y una amenaza común. Pero puede poner en peligro la vida de los niños porque infecta profundamente los pulmones para causar neumonía o impedir la respiración inflamando sus diminutas vías respiratorias.

Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), solo en los EE. UU., entre 58,000 y 80,000 niños menores de 5 años son hospitalizados cada año, y entre 100 y 300 mueren a causa de esta enfermedad.

Pfizer prevé que con esta vacuna para las mujeres embarazadas se eviten hasta 20,000 hospitalizaciones de bebés al año y 320,000 visitas al médico.