Expertos estadounidenses asomaron la probabilidades de que el fenómeno El Niño se desarrolle este verano que puede tener efectos devastadores, desde olas de calor abrasadoras hasta tormentas más fuertes.
Con el verano también vienen algunas enfermedades. Por ello debemos mantenernos hidratados ya que el 75% del cuerpo de los niños es agua y en el caso de los adultos, el 60%.
Durante un día una persona suele perder en torno a los 2,5-3 litros de agua, ya que ésta forma parte de las excreciones normales del organismo, como la orina, las heces, la respiración o el sudor. Por ende, tomar agua te ayudará a prevenir ciertas afecciones.
El aumento de las temperaturas en verano propicia el que haya una serie de patologías que sean más frecuentes en esta época:
Quemaduras solares
Tomar el son demasiado tiempo y sin protección puede causar quemaduras en la piel de segundo y tercer grado. Se enrojece la piel y pueden producirse ampollas y ulceraciones, además de un intenso dolor.
Es clave que uses protector solar y si quieres aplicarte bronceador, recuerda no excederte en la exposición al sol por muchas horas seguidas.
Diarreas agudas
Suelen durar entre 3 y 7 días. Son de origen vírico y bacteriano y suponen un importante riesgo de deshidratación. Algunas de las recomendaciones generales para prevenir las diarreas es usar agua purificada, hervida o clorada. Lavar y tallar las verduras y frutas. Cocer o freír muy bien los alimentos, sobretodo pescado y mariscos.
Otitis
Se pueden producir porque queda agua en el oído después de un baño en la playa o la piscina (otitis del nadador). No introduzcas bastoncillos para limpiar el oído, ya que el conducto cuenta con un mecanismo de autolimpieza.
Si te sumerges en lagos, piscinas o playas, puedes prevenir la otitis agitar la cabeza para retirar el agua del conducto del oído. No nades en aguas contaminadas. Evita el uso prolongado de tapones para los oídos.
Cistitis
Son frecuentes especialmente en las mujeres a causa del bañador mojado y las frías temperaturas del agua.
Faringitis y bronquitis
En la mayoría de los casos están causadas por los cambios bruscos de temperatura, que supone estar en un local con aire acondicionado demasiado frío y salir al calor intenso de la calle.
Conjuntivitis
Las causas pueden ser diversas: exposición al sol, el aire acondicionado o una infección adquirida, por ejemplo, al abrir los ojos bajo el agua de la piscina o la playa sin llevar gafas. También por el uso de lentillas durante demasiado tiempo o estar en ambientes muy cargados.
Reacciones alérgicas a picaduras de insectos
Hay que destacar de manera específica las de avispas y abejas (himenópteros).