El cantante colombiano Maluma se presentó esta semana como empresario en Nueva York al lanzar una marca propia de mezcal, Contraluz, uno de los varios negocios que tiene en marcha y que reflejan la evolución de sus ambiciones, aunque aseguró que la música sigue siendo su prioridad “número uno”.

El artista de 28 años, llamado Juan Luis Londoño Arias, convocó a los medios en un rascacielos de Manhattan para darse a conocer como copropietario de este mezcal, cuyo nombre expresa de alguna manera quién dice ser “detrás del escenario”: “Un soñador que se levanta todos los días a sacar a su familia adelante”, dijo.

“Me parece bonito que la gente conozca mi carrera musical, pero que también me conozca más atrás: quién es el empresario, cuáles son los proyectos que hay aparte de mi música“, explicó la estrella latina, que reveló que además del mezcal tiene una línea de ropa, un criadero de caballos y una productora audiovisual.

“Mi música hizo que todo esto pasara. Nunca voy a demeritar mi carrera musical, pero siento que a raíz de que uno va cambiando y creciendo también cambian y crecen los sueños. No quiere decir que me voy a retirar de la música, porque para mí es lo número uno, pero esto es un ‘side project’ (proyecto paralelo)”, explicó.

Maluma dijo haber crecido en el mundo de los negocios gracias a personas de su entorno, incluyendo a su padre, y sostuvo que en los últimos diez años ha crecido musicalmente, pero también como “emprendedor de bajo perfil” que ha decidido que es “momento de contarle al mundo esos proyectos” que tenía “bajo la mesa”.

“Mis sueños simplemente no son ambición por conseguir dinero, sino para inspirar a generaciones“, apuntó el cantante, que se suma a una larga lista de celebridades que combinan el mundo del entretenimiento con los negocios, entre ellos su paisano, el reguetonero J Balvin.

Preguntado por sus referencias empresariales, indicó que el actor The Rock (Dwayne Johnson), que tiene una productora, es uno de ellos: “Sabe combinar su actuación con sus negocios, y ahí estamos en este momento, aprendiendo de la mano de los grandes“.

En el caso de Contraluz, que ha comenzado a distribuirse en México y que espera ampliar a Europa, reveló haber “puesto varios millones de dólares para ser dueño”, con lo cual no se limita a ser el rostro de una marca, sino que se posiciona como uno “de los inversionistas más importantes”.