El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, habló el martes con el canciller brasileño, Carlos Franca, sobre la migración regional «sin precedentes» y las formas de colaborar para reducir el número de personas que se dirigen al norte, dijo el Departamento de Estado.

La conversación telefónica entre los representantes de ambos países se produce en momentos en que un número récord de brasileños llega a la frontera sur de Estados Unidos, parte de una ola latinoamericanos que huyen de una región gravemente afectada por la pandemia de COVID-19.

Las detenciones en la frontera sur de Estados Unidos han subido a su mayor nivel en 20 años en los últimos meses, causando dolores de cabeza políticos y logísticos para el presidente Joe Biden.

En la llamada, Blinken y Franca discutieron «los movimientos migratorios irregulares sin precedentes en todo el hemisferio» y las formas en que las naciones podrían trabajar juntas «para detener el creciente flujo de migrantes irregulares en la región», según el portavoz del Departamento de Estado Ned Price.

México planea reimponer requisitos de visa para los visitantes brasileños, según un documento del Ministerio del Interior, algo que no pasa desde 2004 y brinda a los migrantes un camino más fácil para ingresar al país y avanzar hacia el norte.

Durante los primeros 11 meses del año fiscal 2021, unos 46.280 brasileños fueron detenidos en la frontera sur de Estados Unidos, de acuerdo a datos oficiales, lo que se compara con 17.893 en todo 2019.