El Senado de Estados Unidos aprobó el jueves por mayoría abrumadora un paquete de 40.000 millones de dólares en ayuda militar y económica para Ucrania y sus aliados, con ambos partidos unificados en su respaldo a la nueva andanada financiera contra la invasión rusa.

La aprobación final del Congreso al paquete, por una votación de 86-11, ocurrió tres semanas después de que el presidente Joe Biden solicitó una versión de 33.000 millones y luego de que un solitario opositor republicano demoró la aprobación por una semana. Todos los senadores demócratas y todos los republicanos, a excepción de 11, respaldaron la iniciativa.

Estaba asegurada una firma rápida de Biden a la iniciativa, en momentos en que la invasión rusa, que ha fustigado ciudades en Ucrania, entra en su cuarto mes, sin un final a la vista. Eso significa más bajas y destrucción en Ucrania, que ha dependido considerablemente de la ayuda occidental para su supervivencia, especialmente con armamento avanzado. Además, hay nuevos pedidos de más ayuda potencial en el horizonte.

“La ayuda está en camino, una ayuda realmente significativa. Una ayuda que pudiera asegurar que los ucranianos saldrán victoriosos”, afirmó el líder de la mayoría demócrata en el Senado, Chuck Schumer, resaltando un objetivo que parecía impensable cuando Rusia lanzó su brutal ataque en febrero.

La votación fue una patente excepción a las divisiones partidistas que han obstaculizado los trabajos en otros asuntos durante el gobierno del presidente Joe Biden y que solamente parece que se volverán más amplias a medida en que se acerquen las elecciones intermedias. Eso incluye a los republicanos bloqueando que los demócratas inserten en la medida miles de millones de dólares para combatir la pandemia, lo que deja en el limbo sus gestiones para batallar contra el COVID-19.

La semana pasada, la Cámara de Representantes aprobó el plan de ayuda a Ucrania por 368-57, con la oposición completamente republicana. Aunque el respaldo al paquete en ambas cámaras es claramente bipartidista, las deserciones republicanas fueron notables luego de que Donald Trump —que aún es una influencia fuerte en el partido— se quejó de que las sumas deberían ser dirigidas primero a problemas nacionales. “Parece que más y más republicanos MAGA están en el mismo libreto de Putin usado por el expresidente Trump”, dijo Schumer, refiriéndose a las siglas de “Make America Great Again” (“Hagamos grande a Estados Unidos otra vez”) antiguo eslogan de la campaña de Trump.