Entre las muchas consecuencias de la pandemia de COVID-19 que vivimos desde hace 17 meses, los cambios en nuestro estilo de vida no sólo han repercutido en nuestra forma de relacionarnos, sino también en nuestra forma de comer, de ejercitarnos y de consumir bebidas alcohólicas. Ahora, los trasplantes de hígado están al alza durante la pandemia debido al consumo de alcohol en exceso en Estados Unidos.
En este país, tanto los registros para la lista de espera de trasplantes de órganos relacionados con la hepatitis alcohólica, como el número de trasplante de hígado de donantes fallecidos por alguna afección inflamatoria hepática han sido más del 50% superiores que los esperados.
Una investigación realizada por la Universidad de Michigan encontró un incremento en los casos de hepatitis alcohólica relacionados con el aumento en el consumo de alcohol durante la pandemia de COVID-19, y que han sido documentados en diversas investigaciones. Un estudio de RAND Corporation de septiembre de 2020 destacó el incremento del consumo excesivo de alcohol durante la pandemia entre adultos mayores de 30 años, y particularmente entre las mujeres. El consumos excesivo de alcohol está definido como beber cuatro bebidas en dos horas.
Los investigadores de Michigan analizaron 51,488 nuevos registros en la lista de espera de trasplantes de órganos y 32,320 trasplantes de hígado de donantes fallecidos desde el 1 de enero de 2016 y hasta el 31 de enero de 2021. Los hallazgos de los expertos señalan que entre marzo de 2020 y enero de 2021 hubo un incremento significativo en los registros de ambas listas en comparación con el periodo de marzo de 2019 a enero de 2020.
“Este estudio proporciona evidencia de un aumento alarmante de hepatitis alcohólica asociado con el aumento del uso indebido de alcohol durante el COVID-19 y destaca la necesidad de intervenciones de salud pública en torno al consumo excesivo de alcohol”, escriben los autores de la investigación, publicada en JAMA Network Open.