Los alimentos ultraprocesados han sido objeto de debate durante años, pero un estudio de 30 años arroja nueva luz sobre su impacto en la salud y su posible conexión con un riesgo temprano de muerte.

Según este estudio, publicado en la revista The BMJ, consumir alimentos ultraprocesados se asocia con un riesgo aumentado de mortalidad, aunque los diferentes alimentos dentro de esta categoría tienen diferentes impactos.

El estudio, liderado por el Dr. Mingyang Song y su equipo de la Escuela de Salud Pública TH Chan de Harvard, analizó datos de más de 100,000 profesionales de la salud en Estados Unidos a lo largo de tres décadas. Los participantes proporcionaron información sobre sus hábitos alimenticios y estilo de vida cada dos años, incluyendo detalles sobre el consumo de alimentos ultraprocesados.

Los resultados revelaron una correlación entre el consumo de alimentos ultraprocesados y un mayor riesgo de muerte prematura. Aquellos que consumían una mayor cantidad de estos alimentos tenían un riesgo un 4% más alto de muerte por cualquier causa, y un 9% más de riesgo de muertes neurodegenerativas.

Sin embargo, no todos los alimentos ultraprocesados mostraron la misma correlación: las carnes procesadas y las bebidas azucaradas fueron particularmente destacadas como impulsores de este riesgo.

El Dr. Song enfatiza que no todos los alimentos ultraprocesados deben ser eliminados por completo de la dieta. Algunos, como los cereales integrales y los panes, pueden contener nutrientes beneficiosos como fibra, vitaminas y minerales.

También sugiere evitar o limitar el consumo de ciertos alimentos ultraprocesados, como la carne procesada y las bebidas endulzadas artificialmente, que parecen estar asociados con mayores riesgos para la salud.

Pero deben considerarse las limitaciones del estudio. Al ser observacional, no puede establecer una relación de causa y efecto entre el consumo de alimentos ultraprocesados y el riesgo de muerte.

Se necesita una investigación más profunda para comprender qué componentes específicos de estos alimentos podrían estar afectando la salud y cómo se pueden mitigar estos riesgos.

Los expertos coinciden en que la clave para una dieta saludable radica en la calidad general de los alimentos consumidos. Una dieta variada, rica en frutas y verduras coloridas, junto con cereales integrales, es fundamental para reducir el riesgo de enfermedades y muerte prematura. Además, se recomienda prestar atención al contenido nutricional de los alimentos ultraprocesados que se consumen y mantener un equilibrio adecuado en la dieta.

Si bien este estudio arroja luz sobre los posibles riesgos asociados con el consumo de alimentos ultraprocesados, no debe ser motivo de pánico. Lo más importante es adoptar un enfoque equilibrado hacia la alimentación, centrándose en una dieta generalmente saludable y variada, con moderación en el consumo de alimentos ultraprocesados y atención a su contenido nutricional.