La Administración de Drogas y Alimentos (FDA, por sus siglas en inglés) está a punto de aprobar una vacuna para el virus respiratorio sincitial (RSV), el próximo invierno.

Hasta ahora, no se ha aprobado ninguna vacuna contra el RSV en los EE. UU. y se están revisando dos solicitudes: una vacuna de Pfizer y otra de GlaxoSmithKline, ambas para personas de 60 años en adelante.

La vacuna de Sanofi y AstraZeneca ya fue aprobada en Europa y la FDA comenzó a revisar la solicitud de las empresas en enero.

Es común contagiarse con RSV varias veces en la vida ya que el virus infecta a la mayoría de las personas a los 2 años. Cada año el virus mata a más de 10,000 adultos de 65 años o más y alrededor de 300 niños menores de 5 años solo en Estados Unidos.

Hay 11 vacunas contra el RSV en ensayos en EE. UU.

A principio de este invierno los casos de RSV aumentaron drásticamente en los EE. UU., y los hospitales infantiles se desbordaron. Por ello se han incrementado los esfuerzos farmacéuticos para llevar las vacunas al mercado.

Según el Dr. Ofer Levy, director del Programa de Vacunas de Precisión en el Boston Children’s Hospital, existe una necesidad de salud pública muy clara de estos antídotos.

El miércoles, los datos de dos ensayos de vacunas se publicaron en el New England Journal of Medicine. El primero mostró que la inyección de GlaxoSmithKline que esperaba la aprobación de la FDA redujo el riesgo de enfermedad sintomática en un 83 % y de enfermedad grave en un 94 % entre los adultos mayores.

Mientras que el segundo estudio describió los resultados del ensayo de fase 2 de una vacuna fabricada por Janssen, el brazo farmacéutico de J&J, que reduce el riesgo de enfermedad grave en un 80 % entre las personas de 65 años o más.

En total, se están estudiando activamente 11 vacunas contra el RSV en ensayos en EE. UU., según los datos proporcionados a NBC News por PATH, una organización mundial de salud sin fines de lucro.

De estas, siete son para adultos mayores y cuatro están diseñados para proteger a bebés o niños.

“Este es el comienzo de una nueva era”, dijo el Dr. Barney Graham, asesor principal de equidad en salud global en la Facultad de Medicina de Morehouse.

Con esperanzas, el especialista cree que todas funcionarán lo suficientemente bien como para ser aprobadas, según los perfiles de efectos secundarios.