Un brote de Escherichia coli relacionado con las hamburguesas Quarter Pounder de McDonald’s que ha afectado a varias personas en 10 estados de EE. UU., está siendo investigado por las autoridades.
Según informaron los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), al menos 49 personas han caído enfermas, de las cuales una, un adulto mayor en Colorado, ha fallecido. Diez personas más han sido hospitalizadas debido a complicaciones graves derivadas de la infección.
Aunque los funcionarios de salud aún no han identificado el componente exacto de la hamburguesa responsable del brote, la empresa ha decidido dejar de utilizar cebollas frescas cortadas y las hamburguesas de carne de un cuarto de libra en un intento por contener la propagación de la enfermedad.
Hay más casos de la bacteria E. Coli por descubrir
Los CDC subrayaron que los casos podrían ser más numerosos de lo que las cifras actuales reflejan, ya que a menudo se requiere un período de entre tres y cuatro semanas para confirmar si una persona enferma está vinculada a un brote en particular.
En este contexto, los síntomas de la infección por E. coli son críticos para un diagnóstico temprano: fiebre alta, calambres abdominales intensos, diarrea (a menudo con sangre) y vómitos son señales comunes de la enfermedad, que puede ser potencialmente mortal, especialmente en personas vulnerables como los ancianos y aquellos con sistemas inmunológicos debilitados.
Los estados que han reportado infecciones incluyen Colorado, Iowa, Kansas, Missouri, Montana, Nebraska, Oregón, Utah, Wisconsin y Wyoming. Las autoridades sanitarias locales han advertido a los consumidores de estas áreas que estén atentos a los síntomas y busquen atención médica inmediata si creen haber sido afectados.
Asimismo, se insta a las personas a revisar cualquier alimento reciente consumido en McDonald’s, especialmente los productos que contengan carne o cebollas frescas, y a seguir estrictas medidas de higiene para prevenir la transmisión del patógeno.
Mientras tanto, McDonald’s está colaborando estrechamente con los funcionarios de salud pública en la investigación, tratando de rastrear el origen del brote y evaluar posibles fallas en la cadena de suministro o en los procesos de manipulación de alimentos.
La empresa emitió un comunicado en el que expresó su compromiso de garantizar la seguridad de sus clientes y su disposición a cooperar en todo momento con las investigaciones. Aunque aún no se ha emitido un retiro oficial de productos, las medidas preventivas adoptadas por la cadena son una clara indicación de la gravedad del brote y de su intención de reducir al mínimo el riesgo para la salud pública.
