El primer ministro israelí Benjamin Netanyahu declaró el jueves que la amenaza de Estados Unidos de retener armamento no evitará que Israel continúe con su ofensiva en la Franja de Gaza, indicando que podría proceder con una invasión a la hacinada ciudad de Rafah a pesar de la oposición de su principal aliado.

El presidente estadounidense Joe Biden ha instado a Israel a no continuar con esa operación por temor a que empeore la catástrofe humanitaria en el territorio palestino. El mandatario informó el miércoles que Estados Unidos no suministraría armamento ofensivo para una operación en Rafah, aumentando la presión sobre Netanyahu.

Pero en un comunicado dado a conocer el jueves, Netanyahu declaró: “Si tenemos que luchar solos, lucharemos solos. Si es necesario, lucharemos con las uñas. Pero tenemos mucho más que uñas”.

El principal portavoz militar israelí, el contraalmirante Daniel Hagari, también pareció restar importancia al impacto práctico de la retención de cualquier armamento. “El ejército tiene las armas que necesita para las misiones que planifica, y también para las misiones en Rafah. Tenemos todo lo que necesitamos”, afirmó Hagari en respuesta a una pregunta en una rueda de prensa.