Las autoridades de México desalojaron este domingo el campamento improvisado de migrantes venezolanos a orillas del río Bravo, en Ciudad Juárez.

Las centenares de carpas estaban instaladas en la zona de frontera entre México y Estados Unidos y alojaban a los migrantes que querían cruzar a suelo estadounidense.

Según prensa local, la razón detrás de la decisión del desalojo fue el riesgo de incendio que, para la Protección Civil Estatal de México, existía debido a las fogatas que los migrantes encienden cerca de las casas de campaña para mitigar el frío.

Pero no fue un proceso sencillo, tal y como se ve en las imágenes de agencias. Se observa fuego en las carpas, algunas personas resultaron heridas y se presentaron así forcejeos entre migrantes y agentes de policía.

El campamento estaba instalado a orillas del río hace más de un mes después de que el gobierno del presidente estadounidense, Joe Biden, anunciara el cierre de la frontera con México para los venezolanos, con el objetivo de “abordar la migración irregular más aguda y ayudar a aliviar la presión sobre las ciudades y estados que reciben a estas personas”.

Ciudad Juárez es uno de los cinco puntos de la frontera mexicana que recibe a los venezolanos expulsados por las autoridades estadounidenses desde el miércoles 12 de octubre de 2022, cuando se anunció la nueva medida migratoria.

Más de 150,000 venezolanos ingresaron a territorio estadounidense a través de la frontera con México durante el último año fiscal, un aumento de 293% con respecto al año anterior.