El Ejército de Estados Unidos considera una decena de latinos, entre ellos Emily Pérez, entre un centenar de sus héroes para asignar nombres a guarniciones que hasta ahora han honrado a polémicos oficiales de la Confederación en la Guerra Civil o de Secesión (1861-1865).

La lista, sujeta a cambios, incluye los nombres de nueve hombres y una mujer latinos que recibieron honores por sus acciones en combate en la Segunda Guerra Mundial, la guerra de Corea, la guerra de Vietnam y la guerra de Irak.

La Comisión de Nombres en el Ejército recibió más de 34.000 propuestas y ha recortado su lista a alrededor de un centenar de nombres para reemplazar, entre otros, los que ahora identifican a Fort Hood (Texas), Fort Benning y Fort Gordon (Georgia), y Fort A.P. Hill, Fort Lee y Fort Pickett (Virginia).

La única mujer en esta lista es Emily Pérez, nacida en una familia negra y latina, muerta a los 23 años de edad por la explosión de una bomba durante operaciones de combate en Al Kifl, cerca de Najaf, en Irak en 2006.

Pérez fue la primera mujer graduada en la Clase 9/11 de West Point que murió en combate y sus condecoraciones incluyen la Estrella de Bronze, el Corazón Púrpura, la Medalla de Servicio Nacional de Defensa, y la Insignia de Acción de Combate.

Otro incluido en la lista es el sargento Alejandro Ruiz, nacido en 1923 en Loving (Nuevo México), quien recibió la Medalla de Honor por sus acciones en la Batalla de Okinawa, en las Islas Ryukyu durante la Segunda Guerra Mundial.

La Comisión de Nombres, que preside la almirante Michelle Howard, hará su selección final de nombres para recomendación en el plan de nomenclatura que ha de presentarse al Congreso antes del 1 de octubre próximo.

Los otros latinos son Roy Benavídez, Richard Cavazos, Félix Conde, Marcario García, Eduardo Gómez, Rodolfo Hernández, José López y Humberto Roque Versace.

En años recientes ha habido en Estados Unidos una campaña para quitar de monumentos, calles, parques e instalaciones militares los nombres de quienes entre 1861 y 1865 encabezaron la Confederación secesionista.

«Es importante que los nombres que recomendemos para esas guarniciones reflejen apropiadamente el coraje, los valores y sacrificios de nuestros hombres y nuestras mujeres en las Fuerzas Armadas», señaló en un boletín la almirante Howard.

«También consideramos el significado local y regional de los nombres y su capacidad para inspirar y motivar a nuestros soldados», añadió Howard.