Más de 180,000 inmigrantes indocumentados están bajo estricta vigilancia de la oficina de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) con la aplicación parcial de un programa alternativo a la detención en prisiones, pero el plan completo requerirá que lleven grilletes y obedezcan un “toque de queda”.

Así lo revela Axios, que señala que los no ciudadanos tendrán una vigilancia severa, al tiempo que deben reportarse a las oficinas migratorias, mientras reciben alguna respuesta sobre sus casos.

“Hay casi 180,000 inmigrantes indocumentados en los EE.UU. que ya están siendo monitoreados con monitores de tobillo y otros dispositivos rastreables”, indica el informe. “La administración está planeando un programa piloto ampliado de confinamiento domiciliario y toque de queda, con el objetivo de reducir los espacios de detención con fines de lucro”.

La cifra es mayor a los 150,000 que tenía en registro el Centro de Información y Acceso de Registros Transaccionales (TRAC) de la Universidad de Syracuse, en Nueva York, sobre indocumentados de recién ingreso al país.

El nuevo plan sería parte de una política del secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, sobre ofrecer opciones distintas al encarcelamiento de los indocumentados.

“El nuevo programa piloto se lanzará en Baltimore y Houston con un par de cientos de inmigrantes en las próximas semanas”, indicó el portal citando a un funcionario del DHS.

Aunque los inmigrantes podrán trabajar, también deberán seguir los lineamientos.

“Implicará un control más estricto que otros programas alternativos a la detención… en este momento, pero los requisitos específicos sobre cuándo alguien debe estar en casa podrían variar según el caso”, se agregó.

Se espera que el programa sea implementado completamente a finales de este año y es alternativo a las actuales opciones de vigilancia fuera de centros de detención.

Las críticas han comenzado contra ICE por su nueva estrategia, ya que el director ejecutivo de Envision Freedom Fund, Carl Hamad-Lipscombe, lo considera “invasivo”.

“Los grilletes electrónicos, la vigilancia y las estrictas restricciones, como los controles de entrada y los toques de queda, son punitivos, invasivos y dañinos”, afirmó.

Cabe recordar que bajo las opciones alternativas de detención para indocumentados, si no acuden a las citas con ICE sin previo aviso o reagendarla podrían ser puestos en proceso de deportación automáticamente.