La llegada de niños solos a la frontera se ha incrementado en los últimos meses, a pesar de los esfuerzos del gobierno de Joe Biden para reducir el envío de menores. En julio se reportó el arribo de al menos 19,000.

El mayor salto de llegada de niños no acompañados ocurrió de febrero a marzo del 2021, cuando pasó de 9,266 a 18,723. Es decir, un incremento del 100 por ciento.

Aunque las cifras bajaron ligeramente, no alcanzaron los mínimos de inicios del año en curso y, mucho menos, el principio del año fiscal 2021, que comenzó en octubre, cuando llegaron 4,690 niños sin sus familiares.

También la cifra de llegada de familias completas se mantiene alta con más de 80,000, pero un número menor a las 88,000 de junio, según cifras preliminares proporcionadas a The Associated Press por David Shahoulian, subsecretario de política fronteriza e inmigratoria del Departamento de Seguridad Nacional (DHS).

Aunque la Administración Biden mantiene una política de atención a los niños ha acelerado los procesos de deportación para las familias completas, además de extender la aplicación del Título 42 para la expulsión de prácticamente cualquier inmigrante ante la pandemia de COVID-19.

Grupos de activistas han criticado las nuevas medidas del gobierno demócrata, al considerar que amplían acciones de la administración del expresidente Donald Trump.