El Tribunal Supremo de Estados Unidos rechazó este miércoles una petición del expresidente Donald Trump (2017-2021) para mantener ocultos unos 700 documentos sobre el asalto al Capitolio del 6 de enero de 2021, en el que murieron cinco personas.

La decisión de la máxima corte abre la puerta para que los Archivos Nacionales de EE.UU., que tienen la custodia de esos documentos, se los entreguen al comité de la Cámara de Representantes que investiga el suceso.

El contenido exacto de esos documentos se desconoce, pero supuestamente se trata de correos electrónicos, borradores de discursos y registros de visitas que podrían revelar qué pasó exactamente en la Casa Blanca durante el asalto al Capitolio y los días que rodearon ese suceso.

En su fallo, de cuatro páginas, el Tribunal Supremo respalda las decisiones que habían tomado todas las instancias judiciales inferiores, que rechazaron la petición del expresidente.

Sin embargo, los jueces no entraron a valorar si Trump goza de derechos especiales reconocidos en la doctrina del “privilegio ejecutivo”, lo que significa que no pueden divulgarse sin su permiso ciertas informaciones.

Trump había reclamado ese “privilegio ejecutivo” para impedir salieran a la luz los documentos; pero todos los jueces que consideraron su caso concluyeron que no gozaba de ese derecho porque ya no está en la Casa Blanca.

El caso se remonta a principios de octubre, cuando el presidente estadounidense, Joe Biden, autorizó a los Archivos Nacionales a entregar los documentos al comité que investiga el asalto.

Pocos días después, el 18 de octubre, Trump interpuso una demanda ante la corte federal de Washington D.C., pero en noviembre una jueza de esa instancia falló en su contra.

Los abogados de Trump recurrieron ese fallo y acudieron ante la corte de apelaciones del Distrito de Columbia, que también desestimó el recuerdo, por lo que el Tribunal Supremo era su última opción.

El Tribunal Supremo está compuesto por nueve jueces, de los que seis están considerados conservadores y tres progresistas. Además, Trump nombró a tres de los conservadores: Neil Gorsuch, Brett Kavanaugh y Amy Coney Barrett.

Todos los jueces nombrados por Trump fallaron en su contra y solo el magistrado conservador Clarence Thomas, nombrado por el republicano George H.W.Bush (1989-1993), se pronunció a favor del expresidente.

El comité que reclama los documentos fue creado por la presidenta de la Cámara de Representantes, la demócrata Nancy Pelosi, y está formado por una mayoría de congresistas demócratas, aunque hay dos integrantes republicanos -Liz Cheney y Adam Kinzinger- que están enfrentados con Trump.

Su misión es investigar por qué ocurrió el asalto, quién fue responsable y qué puede hacerse para evitar otro suceso similar.

Con ese propósito, ha solicitado acceso a documentos hasta ahora secretos, como los de Trump, y ha citado a declarar a exmiembros de su Gobierno, incluido el polémico ideólogo y su exasesor Steve Bannon, quien se negó a declarar y ha sido acusado de desacato por la vía penal.

El pasado 6 de enero, unas 10.000 personas -la mayoría simpatizantes de Trump- marcharon hacia el Capitolio y unas 800 irrumpieron dentro del edificio para impedir que se ratificara la victoria de Biden frente a Trump en las elecciones de noviembre de 2020.

Cinco personas murieron y cerca de 140 agentes fueron agredidos.